Costa Rica registró resultados positivos en sus finanzas públicas al cierre del primer semestre del 2025. El país alcanzó un superávit primario equivalente al 1 por ciento del PIB, gracias a un mayor ingreso tributario y a la reducción en el pago de intereses de la deuda.
Según el Ministerio de Hacienda, la relación deuda a PIB se redujo a 57,4 por ciento, cifra menor al 59,8 por ciento reportado al cierre del 2024. Además, el déficit financiero mejoró en 0,3 puntos porcentuales respecto al año anterior.
El ministro de Hacienda, Rudolf Lücke Bolaños, aseguró que estos logros fortalecen la confianza internacional y consolidan a Costa Rica como un país con finanzas más sólidas, lo que se refleja en la baja del indicador de riesgo EMBI, que cerró en 206 puntos básicos, el nivel más bajo entre economías comparables.
Con estos resultados, el gobierno reafirma su compromiso con la sostenibilidad fiscal y la meta de alcanzar el grado de inversión.